31 de mar de 20202 min.
La enfermedad por coronavirus (COVID-19) es una enfermedad infecciosa causada por un coronavirus recientemente descubierto.
La mayoría de las personas infectadas con el virus COVID-19 experimentarán una enfermedad respiratoria leve a moderada y se recuperarán sin requerir un tratamiento especial. Las personas mayores y aquellos con problemas médicos subyacentes como enfermedades cardiovasculares, diabetes, enfermedades respiratorias crónicas y cáncer tienen más probabilidades de desarrollar enfermedades graves.
La mejor manera de prevenir y retrasar la transmisión es estar bien informado sobre el virus COVID-19, la enfermedad que causa y cómo se propaga. Protéjase a sí mismo y a los demás contra las infecciones lavándose las manos o usando un desinfectante a base de alcohol con frecuencia y sin tocarse la cara.
El virus COVID-19 se propaga principalmente a través de gotas de saliva o secreción de la nariz cuando una persona infectada tose o estornuda, por lo que es importante que también practique la etiqueta respiratoria (por ejemplo, al toser en un codo flexionado).
En este momento, no hay vacunas o tratamientos específicos para COVID-19. Sin embargo, hay muchos ensayos clínicos en curso que evalúan posibles tratamientos. La OMS continuará proporcionando información actualizada tan pronto como estén disponibles los hallazgos clínicos.
Para prevenir la infección y retrasar la transmisión de COVID-19, haga lo siguiente:
Lávese las manos regularmente con agua y jabón o límpielas con un desinfectante para manos a base de alcohol.
Mantenga al menos 1 metro de distancia entre usted y las personas que tosen o estornudan.
Evita tocarte la cara.
Cúbrase la boca y la nariz al toser o estornudar.
Quédese en casa si no se siente bien.
Abstenerse de fumar y otras actividades que debilitan los pulmones.
Practique el distanciamiento físico evitando viajes innecesarios y alejándose de grandes grupos de personas.
El virus COVID-19 afecta a diferentes personas de diferentes maneras. COVID-19 es una enfermedad respiratoria y la mayoría de las personas infectadas desarrollarán síntomas leves a moderados y se recuperarán sin requerir un tratamiento especial. Las personas que tienen afecciones médicas subyacentes y las personas mayores de 60 años tienen un mayor riesgo de desarrollar enfermedades graves y la muerte.
Los síntomas comunes incluyen:
fiebre
cansancio
tos seca.
Otros síntomas incluyen:
falta de aliento
achaques
dolor de garganta
y muy pocas personas informarán diarrea, náuseas o secreción nasal.
Las personas con síntomas leves que de otra manera están sanas deben aislarse por sí mismas y comunicarse con su proveedor médico o con una línea de información de COVID-19 para recibir asesoramiento sobre pruebas y derivaciones.
Las personas con fiebre, tos o dificultad para respirar deben llamar a su médico y buscar atención médica.